MIAMI-DADE COUNTY, Fla. – Una mujer que buscaba adoptar un perro en los Servicios de Animales de Miami-Dade se encontró en una situación inesperada cuando el perro que deseaba fue considerado no disponible y programado para ser transferido a otro estado.
Joy Walther visitó el refugio con la intención de adoptar a Lupita, una cachorra callejera de 5 meses, pero le informaron que no podía hacerlo porque la perra estaba en cuarentena.
Walther explicó que sintió una conexión inmediata con Lupita en su jaula, pensando que la cachorra estaba disponible para adopción.
“Le dije: ‘¡Te voy a llevar a casa!’ Y así comenzó la lucha de mi vida durante las siguientes dos semanas”, relató Walther.
Sin embargo, el personal del refugio le notificó que Lupita sería trasladada a un refugio en Georgia debido a una obligación contractual, a pesar de los intentos de Walther de adoptarla localmente.
“Estos acuerdos son fundamentales para nuestra capacidad de sacar a los perros del refugio”, explicó Flora Beal, portavoz de los Servicios de Animales de Miami-Dade.
El refugio ofreció a Walther otros perros para adoptar, pero ella se negó.
Frustrada, Walther se comunicó con la defensora de los animales de Local 10, Jacey Birch, con la esperanza de recibir apoyo, pero M-DAS mantuvo firme su decisión.
“Me dijeron que no podía verla porque estaba en cuarentena”, recordó Walther. “También me informaron que sería transferida a otro refugio en otro estado. Les dije que quería adoptarla, y me respondieron que no era posible”.
Decidida a no renunciar a Lupita, Walther condujo seis horas al norte hasta Georgia y llegó a la Sociedad Protectora de Animales del Condado de Camden antes de que abrieran, asegurándose de poder adoptar a la perra.
“¡Vinimos desde Miami por ella! Estamos comprometidos con esta perra”, declaró Walther después de adoptar exitosamente a Lupita.
M-DAS, que colabora con 200 socios de transporte a nivel nacional, defendió su decisión, argumentando que las transferencias fuera del estado a veces son necesarias para liberar espacio para más animales, especialmente para razas grandes que son más difíciles de colocar localmente.
El refugio explicó que es parte de su política mover perros a otros refugios como parte de estos acuerdos.
“¿Por qué tuvo que viajar hasta Georgia para adoptar a un perro que estaba aquí?”, preguntó Birch a Beal.
“Apreciamos su dedicación para adoptar a este perro. Desafortunadamente, ella eligió un perro que ya tenía un compromiso”, respondió Beal.
A pesar de comprender las políticas del refugio, Walther sigue sin entender por qué se rechazó a una adoptante local mientras enviaban al perro que quería fuera del estado.
“Estamos desbordados, tenemos demasiados animales, no sabemos qué hacer, los estamos sacrificando porque no tenemos dónde albergarlos”, comentó Walther. “Yo estaba allí, quería llevarme al perro, y lo hicieron imposible”.
M-DAS continúa enfocándose en encontrar hogares para mascotas sin hogar a través de asociaciones y transferencias, ayudando a muchos animales a encontrar nuevos hogares incluso cuando las adopciones locales no están disponibles de inmediato.