PINELLAS COUNTY, Fla. – Hace más de cinco años, una madre de Florida de 30 años fue acusada de matar a su hijo de 5 meses después de que este sufriera un traumatismo craneoencefálico mientras ella estaba furiosa durante una llamada telefónica con su padre.
En 2019, el bebé Mason sufrió una lesión cerebral traumática en su casa de Palm Harbor y falleció unos cuatro días después en el hospital, según agentes de la Oficina del Sheriff del Condado de Pinellas.
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La fiscalía del condado acusó a Burgandie Márquez de asesinato en primer grado y anunció que se preparaba para solicitar la pena de muerte.
Su juicio estaba programado para septiembre, pero recientemente aceptó un acuerdo con la fiscalía. Los registros judiciales del condado muestran que hubo una audiencia previa al juicio el 5 de marzo y Márquez, quien nació en Illinois, cambió su declaración a culpable de asesinato en segundo grado ante el juez de circuito del condado, Philip J. Federico.
Una sentencia de cuatro páginas puso fin al caso. Márquez, de 35 años, fue condenada a 45 años de prisión con crédito por el tiempo cumplido.
Ha estado en prisión desde su arresto el 28 de septiembre de 2019. El Tampa Bay Times siguió el caso y fue el primero en informar sobre el acuerdo de culpabilidad el viernes, añadiendo que el caso había “planteado dudas en el Departamento de Niños y Familias sobre si se podría haber hecho más para proteger a Mason, quien estuvo expuesta a drogas en el útero por una madre con antecedentes conocidos de problemas de salud mental y abuso de drogas”.