LA PAZ – El presidente de Bolivia Luis Arce anunció el martes que no buscará la reelección en los comicios del próximo agosto y pidió a su exaliado Evo Morales que haga lo mismo, durante lo que calificó como un intento por buscar la unidad del partido gobernante luego de varios meses de divisiones internas.
“Doy a conocer al pueblo boliviano mi decisión de declinar mi candidatura”, dijo el mandatario en un mensaje.
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Arce hizo un llamado para alcanzar la unidad del partido gobernante, el cual afronta fuertes divisiones que ponen en riesgo su hegemonía de 19 años. También planteó al presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, de las filas de Morales, que reunifique al oficialismo con una candidatura única.
La imagen del mandatario se ha visto golpeada por la crisis económica que afecta al país.
El anuncio de Arce se produce seis días antes de la fecha límite para la inscripción de candidatos.
Morales, por su parte, ha insistido en postularse a la presidencia a pesar de que existe un fallo constitucional que lo inhabilita, además de que enfrenta una investigación judicial —con orden de captura en su contra— por un caso en el que presuntamente abusó de una menor de edad durante su presidencia, la cual resultó embarazada.
El exgobernante no ha dado a conocer aún el partido político por el que postularía y sus críticos aseguran que se ha quedado sin opciones. Sin embargo, Morales ratificó que organizará una marcha con sus partidarios para inscribirse como candidato el viernes en la capital, a pesar de que permanece atrincherado desde octubre pasado en su feudo político en el Chapare, en el centro de Bolivia.
Arce llamó a Morales a no insistir en ser candidato a la presidencia. “Primero, porque constitucionalmente no puede ser y segundo, porque la dispersión y fragmentación del voto sólo favorecería a la derecha”, agregó.
A las afueras de Palacio de Gobierno, Arce salió y fue cargado en hombros por sus partidarios entre gritos de “¡Lucho, Lucho!”.
“Arce era un voto marginal”, dijo el analista político, Marcelo Arequipa, quien agregó que es posible que se alcance una unidad, pero que depende de Morales.
“La decisión es perder el poder o seguir en el poder ¿qué preferirán?”, mencionó. “El gran favorecido si Morales acepta el reto de Arce de dejar su aspiración de ser candidato es Rodríguez”.
Una oposición dividida en varios líderes, que también buscaba presentar un frente unido, no logró concretar un solo bloque, incluso después que las disputas del partido gobernante abrieron la posibilidad de triunfo en los comicios.